13 de diciembre de 2006

Están aquíiiiiii...................

A pesar de que ya deberían haberse extinguido, o eso es lo que nos han hecho creer, los ogros, siguen existiendo, y en algunos casos incluso comparten parte de nuestra vida.

Hace muchos, muchos años, acabaron con ellos gracias a ciertas urdicias del sabio que habitaba en la región de los Ogros.

Utilizando el oro de los Nibelungos, fueron capaz de retenerlos en sus guaridas. El oro es algo que encandila a los Ogros, y el contar y acumularlo es uno de sus vicios. De este modo los tuvieron retenidos durante muchos años.

Pero, cuando ya los ogros, cansados de contar sus riquezas decidieron salir de sus cuevas, los entonces pobladores, tuvieron que recurrir al anillo del Nigromante. Gracias a este anillo, pudieron atraer a los ogros y someterles a su voluntad.

Mientras el anillo fue pasando de padres a hijos, el problema se solventó y la paz habitó entre los humanos.
Pero... las discrepancias que fueron creándose en el seno de las familias, fueron debilitando los poderes del anillo, hasta tal punto, que los ogros se hicieron fuertes y lograron salir al exterior. Una vez fuera, el poder del anillo se volvió a su favor, confiriéndoles forma humana, de tal modo que consiguieron mezclarse con los humanos sin problema y logrando así la perpetuación de su especie.

Ahora, pululan a nuestro lado. Ya no se les reconoce por ese acusado olor a azufre, puesto que en su epidermis llevan incluso perfumes de diseño, pero... de cuando en cuando, algún bufido les delata. Tienen los hombros anchos y en ocasiones, para disimular su grotesca voz, la elevan para provocar miedo en aquellos que les rodean. Eso si, sin violencia, en esta ocasión.

Como ya os he dicho, es difícil reconocerlos, pero si estaís cerca de alguno, seguro que terminaís deducciendo su real perfil de ogro. Tratan de someter a todos los que tienen cerca. Quizás pueda ser un compañero de trabajo, un comerciante de algún Centro Comercial, un conductor de algún medio de transporte, ó... vuestro jefe. ¿Porqué no?

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Vaya, esto explica muchas cosas sobre la alcaldesa de mi pueblo...

almena dijo...

Suelen quedar desarmados si les dices:
"no te enfades!"
rápidamente responden: "no, si yo no me enfado..."
y cambian su cara de ogro ¡pruebalo!
:)

besos!

Anónimo dijo...

dicen que hay ogros entre los candidatos a algun premio nobel.

Perovsquita dijo...

Aunque... para no dar una imagen tan negativa, esperemos que tambien tengan su pequeño corazoncito, y lo muestren alguna vez, claro está!