12 de julio de 2010

Seguimos...

Se acercó decidida hasta la primera caja. Tiró con fuerza de la cinta de embalar que la precintaba y escuchó como se iba desgranando el viejo cartón a la vez que viejos tebeos y revistas caían al suelo.

Una por una, las fue echando un vistazo, hojeándolas con rapidez, y sonriendo cuando había algún titular que llamaba su atención. "Cielos, parecía que hubiera encontrado un vestigio de una civilización anterior... Tanto habían cambiado las cosas..."
Terminó con la primera caja, sin haber encontrado nada que mereciera la pena volver a ser guardado, salvo un par de recortes en los que aparecían un par de nombres conocidos bajo unas fotos simpáticas.

Avanzó hasta la segunda caja, repitiendo la misma operación que en la anterior para abrirla. Un par de ositos de peluche y unos viejos jerseys de aquella época en la que iba al colegio aparecieron.
Cogió uno de los osos y lo acercó hasta la nariz esperando que le llegaran aquellos olores de la niñez, pero... no llegó hasta su pituitaria nada más que olor a cerrado, abandonado y una pequeña nube de polvó que le hizo estornudar. "Aaaaaachís.. Aaaaachís.." No podía parar. "Aaaaachís...."

En uno de estos estornudos, al abrir los ojos, éstos, percibieron un montoncito de sobres atados con una cinta de pelo roja, que permanecían apoyados sobre un lateral de la caja, esperando pasar desapercibidos.

Con mano decidida cogió el paquetito, pensando que serían las cartas que siendo una niña, mandaba a los Reyes Magos, y que sus padres hubieran guardado pensando que así el tiempo se pararía y aquellos tiempos felices durarían eternamente. Imágenes del pasado se agolparon en su retina, y un par de silenciosas lágrimas rodaron por sus mejillas.

- Continuará -



2 comentarios:

JuanMa dijo...

¡No me dejes con la intriga!

(Ya tengo lo menos tres hipótesis de lo que serán las cartas...).

Un beso intrigado.

almena dijo...

Perovsquita ¿no vas a seguir?
Te esperamos
:)

un abrazo!